31 mayo, 2017

Año 2008

Por Laura Feinsilber

“Los Artistas del Pueblo-1920-1930” en OSDE

 

¿Qué es el arte?. ¿Para qué sirve el arte?. ¿Cuál es su función?.Preguntas a las que todavía se sigue ensayando respuestas eran las que se planteaban “Los Artistas del Pueblo-1920-1930”, exposición que se exhibe en Imago-Espacio de Arte Fundación Osde .

Ciento cuarenta y tres obras de un grupo de cinco artistas que tuvo importante gravitación en el desarrollo del arte argentino del siglo XX : José Arato, Adolfo Bellocq, Guillermo Facio Hebequer, Abraham Vigo, Agustín Riganelli tambien vinculados con los escritores del Grupo de Boedo , entre ellos, Elías Castelnuovo, Alvaro Yunque, Leonidas Barletta con quienes compartían la idea de combatir por un arte comprometido.

Su curador, Miguel Angel Muñoz, lo define como “el primer grupo de arte social en la Argentina” y estaba compuesto por hombres provenientes de sectores populares que adherían a las ideologías obreras de la época y cuya utopía era la transformación de la sociedad por el arte.

Fueron pioneros de la obra múltiple pensando en el pueblo como destinatario y tema privilegiado de sus obras, es decir, enfatizaron las imágenes de los sectores vulnerables y marginados , las mujeres, los obreros, los vagabundos.

Adhieren a una estética realista y urbana instalada en una Buenos Aires que podía catalogarse como ciudad moderna y en la que en los 20 se afianzaron las instituciones dedicadas al arte. Muñoz señala en el texto del catálogo “que además de preferir las técnicas más artesanales, la imagen debía ser accesible a los sectores populares, por ejemplo, el grabado y la gráfica utilizadas como estrategia para la popularización del mercado artístico.

Existían otos grupos, “los pintores de la Boca “ con Quinquela Martín a la cabeza, el grupo de Boedo, simpatizantes de las ideas anarquistas que tanta difusión tenían en el ambiente obrero e intelectual de Buenos Aires, su posición es combativa, impugnan el arte académico representado por Fader , Quirós y tambien el de vanguardia en el que estaban Pettoruti,Xul Solar, Del Prete.

Para comprender su beligerancia así como su compromiso, nada mejor que los dichos de Facio Hebecquer (1889-1935): “Tomamos parte activa en el movimiento revolucionario, vivimos con los obreros en el puerto, habitábamos los mismos casuchones sucios, comíamos en los mismos fogones inmundos. Sentí por primera vez la vergüenza de no ser más que un intelectual” Tambien rescatamos una frase que revela su coraje y que hoy debería ser objeto de reflexión: “Allí vimos claro las masturbaciones psíquicas en el arte. Algo había superior a la “ plástica” y el “arte” y ese algo era la criatura humana.”

Tambien Adolfo Bellocq (1973) señaló : No puedo olvidar que nuestra escuela y estudios fue la calle, el puerto, las fábricas, los inquilinatos, los corralones…y así lo documentan sus grabados , tomando partido por los desheredados en títulos como “Viejos desesperados”, “Vagos”, “Atorrantes”.

Autor del Monumento a Florencio Sánchez y del Monumento a los caídos en la revolución del 6 de setiembre, las esculturas de Agustín Riganelli (1890-1949) remiten a mujeres de arrabal ,madres proletarias que encarnan ideales humanitarios y de índole social.

Describió el clima bohemio del taller de Facio Hebecquer donde se reunían, entre otros, con Quinquela, Juan de Dios Filiberto, Discépolo, “”disentíamos en forma tal que los vecinos se alarmaban con nuestros gritos….no nos perdonábamos nada…se juzgaba la obra de cada cual con libertad…Facio Hebecquer había declarado la guerra a muerte a ese silenciar de las obras que es una táctica de los arribistas (de una entrevista al artista en Cr´tica en 1935).

Abraham Vigo (Montevideo 1893, Buenos Aires1957)comenzó su obra gráfica en la década del 20, ilustró numerosas publicaciones “Claridad”, “Unión Sindical”, “Para Ti”, “El Hogar” y fue un escenógrafo destacado en los teatros independientes , Teatro del Pueblo, Teatro Experimental de Artye, expuso bocetos escenográficos en Amigos del Arte y en 1943 obtuvo el Primer Premio en el Salón Nacional de Bellas Artes.

Destacamos las apocalípticas aguafuertes “Rotativas” y “Tierra” (1936)

Además de las obras expuestas se incluyen publicaciones de la época como la revista “ Contra”, “Claridad”, el original de “El ladrón Honrado” de Abraham Vigo, portada de la revista “Los Pensadores”, las ilustraciones de Bellocq para el libro “Historia de Arrabal” de Manuel Gálvez.

Publicado en Ambito Financiero 2/5


Stella Sidi

 

La propuesta de Stella Sidi se aleja decididamente de cualquier facilismo representativo y actúa como disparadora para abordar un tema como “Amores Prohibidos” y su antecedente “Costura y Suturas”.

En ambas se involucra en la visualización de determinadas problemáticas acerca del rol de la mujer artista para la que siempre se reservó un espacio íntimo y a la que se vinculó a lo decorativo, precioso o sentimental.

Sobre el tema de género han corrido ríos de tinta a través de la historia del arte con sus exclusiones, reivindicaciones, diferencias sexuales. Y el cuerpo con todas sus implicancias: belleza, placer, dolor, envejecimiento y muerte así como centro de espectáculo del que no está ausente la autoflagelación, la política, el movimiento feminista y sus derivaciones como desafío contra poder patriarcal.

Así se llega al conceptualismo lo que nos llevaría a hacer un paneo sobre distintas décadas en las que la artista mujer, gracias a ciertas estrategias ha alcanzado un importante protagonismo en el espectro de las artes visuales.

Afortunadamente la multipluralidad es cada vez más amplia, en ella convergen happenings, performances, instalaciones, fotografía, video arte, así como todas sus posibles derivaciones e interrelaciones.

No obstante estar consustanciada con este desarrollo tan abarcativo, Sidi apela al dibujo, medio esencial, ancestral, le es entrañable, es un gesto natural que utiliza como sostén de su pensamiento.

Sidi conoce la anatomía humana y su expresividad a través de sus múltiples pliegues. Los cuerpos están difusa y sutilmente expuestos, aún sus entrañas, recubiertos por velos, creemos que hay un ocultamiento, un cierto pudor para expresar tanto el dolor como el placer.

También ha acudido a los grandes maestros del arte universal y sacado de contexto a muchos de los personajes que en el transcurso del tiempo se convirtieron en emblemáticos e icónicos , como una vuelta de tuerca a la “cita”, a la reapropiación, muy manipulada en las últimas décadas, para dotarlos de una ambigüedad que invita al misterio y a esa ilusión constitutiva del arte.

Publicado en Ambito Financiero 18/5


Domus /Casa, Fundación Klemm

 

Una relectura casual de la novela “La Casa” de Manuel Mujica Láinez fue disparadora de la exposición Domus /Casa, Fundación Klemm (Marcelo T.de Alvear 626) en la que participan catorce artistas convocados por su curador, Jorge López Anaya, que tenían en el desarrollo de su obra alguna relación con el tema

En la novela la vieja casa “reflexiona” y “se arrepiente” de no haberse entregado totalmente a su habitante: “si

me hubiera conquistado-afirma-, porque a pesar de que antes dije que no me hubiera despojado de ninguno de mis atributos, su influencia se habría proyectado en cambios fundamentales tales que, conservando mi esencia, hubieran hecho que me pareciera a él, a lo que él sentía”.

Marta Ares recurrió a una foto antigua de patio porteño o provinciano con niño y mascota en la que la intervención de una mancha la convierte en fantasmal.

Marcela Astorga relacionó “la casa” con una columna en la que se apilan cueros vacunos, una idea poco relevante. Isabel Chedufau presenta una acumulación de muebles antiguos, sombrerera, perchas, una instalación evocativa de alguien al que pertenecieron.

Dino Bruzzone, con la profesionalidad que lo caracteriza, exhibe una excelente fotografía de la famosa Casa del Puente tal como fue pensada y proyectada, cuya decadencia la ha transformado en “un símbolo del trágico destino nacional”.

Mara Facchin, impresión digital sobre lienzo, impresiones bajo vidrio, silueta de madera, moldes de aluminio, pasa a la pared el espacio de la casa que habita y los objetos que la rodean, una visión esquemática, distante, virtual.

Marina De Caro, extraña resolución para el tema propuesto: una suerte de infante cabeza abajo sobre una pila de libros titulada “Buscando Casa”.

El irreverente Enio Iommi con una obra de 1988, “El arte, arte culinario”, materiales diversos para el gallo,el plato con fideos con salsa, la lata de tomates. Efectivamente, en la casa se cocina y a pesar de la irreverencia de entonces, compone escultóricamente.

A través de unlugarparavivircuandoseamosviejos.blogspot.com/,Ana Gallardo propone con un grupo de amigos concretar la idea del geriátrico propio ya que “nada nos asegura que dentro de unos años no vamos a terminar en un asilo”.

Fotografía-maquetas-video, de la serie “Arquitectura del Deseo” que Fabiana Barreda comenzó a desarrollar en 2006, un cruce de la historia del cuerpo con la historia de la arquitectura. Siempre poética, delicada, transparente, como la casa –protagonista.

Muy lacónicas las obras Silvana Lacarra y Nuna Mangiante. En cuanto a Andrea Moccio nunca se puede entrar a sus salas ya que están invadidas por un mar de papel cortado a manera de guirnaldas que las convierten en inestables. Pensamos que para diferenciarse de otras presentaciones, los muebles deberían haberse adecuado a una casa del siglo XIX, protagonista de la novela.

¿Qué estás pensando?, instalación sonora de Diana Schufer . La artista explica que “son las cosas que se piensan y no se dicen, lastiman, hieren, dan vergüenza.”. Un lenguaje patético. Punto.

Destacamos la creativa obra de Clorindo Testa que ha profundizado el tema y lo ha hecho apelando a la historia y al humor: “Domus Aurea” (grandioso palacio construido por Nerón en Roma situado entre las colinas del Palatino y el Esquilino). Al realizar la obra, por supuesto no en oro ni recubierto de piedras preciosas sino en cartón corrugado, Testa la transformó en la cucha del perro del palacio y por supuesto su rasgo de humor al agregar “Cave Canem” para que nadie sea mordido.

Publicado en Ambito Financiero 23/5


“Caramelo de Menta”- Arte Contemporáneo de Corea

 

“Caramelo de Menta”- Arte Contemporáneo de Corea , fotografías pinturas, objetos, videos, se exhibe actualmente en el Museo Nacional de Bellas Artes.

Según la curadora principal del Museo Nacional de Arte Contemporáneo de Corea, Seungwan Kang, el título se basa en el homónimo de la película dirigida por Lee Chang- Dong (1999) “que evoca la imagen de la menta y simboliza los valores frágiles, la juventud y la pureza, que son frescos y picantes porque todo es nuevo, pero al mismo tiempo, estos valores siempre pueden ser usados o derribados por las nuevas generaciones”.

La mayoría de los 23 artistas seleccionados nacieron en los 60 y 70 y crecieron durante la etapa del cambio más radical de la historia contemporánea de su país en la que tuvieron lugar la consolidación de la democracia así como profundos cambios culturales.

Con gran rigor formal, y esto debe enfatizarse, no importa el medio empleado, estos artistas expresan sus ideas acerca de la expansión del consumo, la pérdida de la identidad, los avances tecnológicos, la sociedad informatizada, la globalización del capital y la cultura, la caída de las utopías, la contaminación ambiental , la incertidumbre acerca del futuro de la humanidad.

“Hecho en Corea”, uno de los tres segmentos en los que está dividida la muestra, habla de la ideología de la Guerra Fría y la división coreana entre el Sur y el Norte. Es escalofriante la fotografía (blanco y negro) de Kan-Yong- Suk que evoca las balas caídas en Maehyang-ri (base militar estadounidense entre1951 y 2005), actualmente una tierra yerma , contaminada por los metales de los armamentos y aunque la Guerra Fría haya terminado, sigue viva y fantasmal en la memoria.

En la Bienal de San Pablo de 2006 conocimos la estremecedora obra de Song Sanghee (nacida en Seúl, vive y trabaja en Ámsterdam) acerca del sistema patriarcal de su sociedad. Aquí sus fotos color en la playa de Maehyang-ri se basan en la historia real de dos chicas que murieron aplastadas por un tanque de la fuerza norteamericana y su justificación lacónica: “ha sido sólo un error”.

Suh Do- Ho instala 60 uniformes escolares a manera de una fila de soldados en formación, un bloque homogéneo que alude a la pérdida de identidad a causa de la ideología del uniforme impuesta desde el estado.

Destacamos las fotos de Oak Jung- Ho que ironiza acerca de la moda de construir aldeas inglesas y la enseñanza del inglés desde muy temprana edad.

“El Fantasma de la Nueva Ciudad” es el título del segundo segmento. El tema central es la urbanización, el abandono del campo por la ciudad, especialmente Seúl donde como contraste aparecen las desigualdades que resultan en el desempleo, la escasez de vivienda, la delincuencia, los derechos de las minorías. El desarrollo económico liderado por el régimen militar tras la década del 60 apuntaba a los logros y éxitos visibles, uno de los efectos negativos del desarrollismo irreflexivo.

En el video de Lim Minouk (DVD, color y sonido 9´16´´) y la poesía de un rapero que a través de un megáfono expresa su angustia ante el desarrollo de una zona en la que la historia queda sepultada por las nuevas construcciones: “Tengo veinte años/ yo también debo vender algo/ meto las manos en los bolsillos y sólo consigo encrespar mis puños/ sin poder sacarlos ni tampoco abrirlos del todo”…

Se plantean los conflictos que trae el derrumbamiento de la moral sexual del Confucionismo y su liberalización, “Love Motels”, una serie de pinturas, óleo sobre acrílico de Kong Sunghum, colores vibrantes , iluminaciones nocturnas de gran artificialidad, una puesta en escena muy de Las Vegas .

Kim Oksun presenta “Felices juntos” (foto color), una serie que plantea la formación de parejas de diferentes nacionalidades y las consecuencias de la inmigración, adaptación al sistema y el problema de la incomunicación a raíz de sus diferencias culturales y lingüísticas. “Donde un Hombre se encuentra con un Hombre”trata la problemática de la identidad sexual. Su autor, Oh Inhwan, propone una experiencia olfativa, visual, táctil. Inolvidable. Lo que primero atrae es el aroma a incienso, el después no lo vamos a revelar, el visitante debe descubrirlo por sí mismo.

La era de la riqueza material, después de los 90 está expresada en el tercer segmento: “El Paraíso Plástico”. “Consumo, luego existo” es el slogan de una sociedad consumista y de la explosión de la cultura de masas en las que conviven tradiciones, la interacción con otras culturas , lo sicodélico, el Pop, los signos religiosos mezclados con el sexo, el placer, “una nueva religión” a la que el funk canta.

Kim Sang- Gil enfatiza con ironía la influencia de las marcas occidentales en fotos de mujeres vestidas con el diseño Burberry, los motoqueros y la Harley Davidson, los perros de lujo extranjeros Alaskan, los consumidores de Internet.

“Lo que vemos y experimentamos, sólo son ilusiones, como resultado de la manipulación,… la clave es no ser engañado” son expresiones de Andrew Darley en Cultura Visual Digital y quizás disparador de las imágenes de un video de Lee Young- Baek. La pantalla muestra flores, instantes después comienzan a moverse. Son soldados en una emboscada que caminan en cámara lenta. El silencio es amenazador. Cuando se detienen se escucha el canto de los pájaros. Un ejercicio de simulación inquietante.

“Peppermint Candy” (Caramelo de Menta), un montaje excelente a cargo de especialistas de nuestro museo mayor, una muestra de alto nivel, imperdible por la intensidad que genera tanto en el orden visual como en el de la reflexión.

Publicado en Ambito Financiero 30/5


Leopoldo Maler

 

A raíz de que la galería neoyorkina Nohra Haime nos informa que exhibe la obra “Silencio” de Leopoldo Maler consideramos oportuno recordar que este artista argentino nacido en 1937 es un pionero en el lenguaje del arte de las instalaciones, el video y la performance.

Se graduó de abogado, se instaló en Londres e ingresó en la Royal Shakespeare Company para familiarizarse con todo el entramado teatral, se desempeñó como periodista radial en la BBC y realizó cortometrajes.

Regresó a Buenos Aires en 1964 y en 1965 intervino en la creación de “La Menesunda” de Marta Minujin junto a Santantonín, Amor, Prayón, Lamelas en la gran usina creativa que fue el Di Tella..

Al volver a Londres y a la BBC presentó “Oigan Ya”, pieza teatral que ironizaba sobre los medios de comunicación. Y así podrían enumerarse sus experiencias con las artes visuales, su relación con el teatro y la danza y la fusión de todas ellas.

Vivió en Nueva York hasta 1983 y llegó a ser el primer rector de la Escuela Parson en su sede de Santo Domingo

Otro de sus temas fue la incomunicación de los seres humanos debido al condicionamiento que ejerce la televisión. Son muchas las obras-espectáculo, como por ejemplo, “Ballet de Grúas”, tres gigantescas grúas ,acróbatas y bailarines con distintas secuencias interrelacionadas.

En 1972 estrenó su ópera “Carnem et Ciclum” en la que se asaba carne que se servía al público y cuya idea central remitía al hombre primitivo y su descubrimiento del fuego.

Varias obras relacionadas con la muerte, lo efímero de la vida, el fin de la civilización revelan sus propuestas siempre reflexivas como “La Ultima Cena”, premiada en la Bienal de San Pablo en 1977: una mesa cubierta por un mantel blanco rodeada de trece sillas sobre las que giran 26 reses de cordero moldeadas en plástico que penden de un dispositivo, obra de carácter ritual y simbólico.

Durante la Bienal de Venecia de 1980 tuvimos el privilegio de presenciar “Horno- Fuego- Forma”, una performance en la Plaza San Marcos, una acción que se juzgó como muy controvertida, en la que al comienzo hizo su entrada un caballo con todos sus arneses.

El artista recortó su silueta en cartón y lo colocó sobre el piso junto a otra realizada con sogas a las que finalmente prendió fuego mientras unos músicos tocaban las trompetas.

También recordamos otra obra relacionada con el fuego realizada en Buenos Aires en 1974, “Homenaje”, una máquina de escribir de la que salían llamas, un tributo a un familiar desaparecido, escritor y periodista valiente e incisivo.

En cuanto a “Silencio”, obra primordial de 1971, fue presentada en el Candem Arts Centre (Londres), muy elogiada por la crítica especializada de la prensa inglesa y no obstante el desarrollo alcanzado por la tecnología en relación a las artes visuales, no ha perdido vigencia y más importante aún, su magia.

Esta “situación” como prefiere Maler que se la denomine, consiste en una habitación oscura de un hospital. Una cama construida con tubos de neón azul sobre la que se proyectan imágenes de una mujer enferma. A su lado, una enfermera real, la cuida. Un cartel luminoso con la palabra “Silencio”. Obra evocadora que provoca la introspección, una escena ante la que lo cotidiano desaparece, y como todo lo realizado por este artista, atemporal, complejo y reflexivo.

En 2005 fue exhibida en el Museo de Arte Moderno de Santo Domingo donde ha creado la Escuela de Diseño de Altos de Chavón por la que han pasado artistas de diferentes nacionalidades.

Leopoldo Maler vive en Bocado Chavón donde tiene su casa – taller y museo.

Sería importante que se realizara en nuestro país una muestra integral de este destacado artista que figura en importantes colecciones privadas y en museos internacionales

Publicado en Ambito Financiero 27/6


 Jorge Diciervo

 

Cuando hacia 1992 conocí la obra de Jorge Diciervo propuse al espectador un juego: entrecerrar los ojos para comprobar que cada una de las formas geométricas que poblaban horizontalmente sus cuadros tenía vida propia.

Sobre fondos de lonas industriales con sus imperfecciones, costuras y tonalidades grises, desarrollaba un repertorio de claroscuros de carácter tenebrista sin resquicio alguno en lo formal.

En 1994 me referí al espacio inestable en el que esas formas emergían, algunas a punto de caer, y a loe recursos de líneas, chorreados imperceptibles, sombras, esfumados, pases de color, es decir, un artista que no se conformaba con cierto preciosismo alcanzado.

En su exposición de 1999, el soporte era la tela blanca tradicional, las formas encontraron un espacio inmaterial que las contenía, concentrando en ellas toda la atención . Aparecían enfrentadas, dialogando y hasta tenían apariencia humana.

Llegamos a 2001 . Las formas encontraron su lugar en el espacio. Una metamorfosis del dibujo a la pintura al objeto y a la escultura tanto en madera como en bronce con su habitual minuciosidad y equilibrio.

¿Qué pasa ahora en su actual muestra en Palatina? Los elementos se han verticalizado, un protagonista es el negro absoluto al que como señala Diciervo no hay que temerle contradiciendo a Kandinsky cuando lo definió como “ la nada sin posibilidades”.

Negro con tierra, negro opaco y negro barnizado, una combinación inquietante, casi lujosa No hay que cerrar los ojos como al principio, todo se da directamente, hay un denso cromatismo pero como contraste hay danzas de rojos y blancos.

Hay que descubrir otras tonalidades, azul negro, algunos verdes o lo que sucede cuando el artista tira, literalmente, el barniz sobre la composición y espera , en actitud Zen, el resultado generalmente azaroso.

Hay homenajes a la música que viene de su infancia, hay maderas de voluptuosa formas toroides, hay sensualidad en la aplicación de la materia, se permite “desprolijidades”antes inconcebibles, una búsqueda insaciable. Con orgullo y a su vez humildad, Diciervo dice: “Es mi muestra más linda”. “Me siento pintor” lo que en cierto modo ejemplifica el pensamiento nietzcheano acerca de que “el arte existe como una necesidad imperiosa de conocimiento”.

Publicado en Ambito Financiero 2/7


Liliana Maresca – Trasmutaciones en el CCR

 

Bajo la curaduría de la crítica e historiadora del Arte Adriana Lauría que ha investigado exhaustivamente la producción de Liliana Maresca (1951-1994) se exhiben en el Centro Cultural Recoleta casi 100 obras además de documentación fotográfica y audiovisual.

Confesamos que a medida que recorremos la muestra se apodera de nosotros una cierta emoción, mezcla de sentimientos encontrados, desazón, intensidad y admiración por lo que fue capaz de hacer y transmitir. Apenas la tratamos pero supimos valorar su obra cuando en 1990 trasladó al Centro Cultural Recoleta la ya entonces brutal realidad de la calle, el mundo degradado del cirujeo y los cartoneros que transmutó, con gran ironía, en una imagen de un carro blanco, no contaminado, así como una lujosa versión en pequeño tamaño bañada en oro y plata. “Recolecta”, jugaba con las palabras pero también exhibía el que provenía del Albergue Warnes con sus colores y olores.

Esta idea de la transmutación ha estado presente desde sus comienzos ya que con materiales de deshecho reciclados realiza una serie de objetos neoexpresionistas en los que se combina lo pictórico, la no sujeción a regla alguna, el desenfado, especialmente influenciada por un gran maestro como fue Emilio Renart.

En muchos casos, por el carácter precario de los materiales o por distintas razones, muchas obras han desaparecido pero allí están los registros fotográficos de Marcos López y otros que las han rescatado para una mejor comprensión y conocimiento.

Maresca era osada, libre, abordó el tema de la sexualidad masculina y femenina, las relaciones entre hombres y mujeres, . Las fotoperformances de su bello cuerpo desnudo en las que la artista utiliza elementos de autotortura como corsés metálicos fueron tambien fotografiadas por Marcos López en una serie titulada”Liliana Maresca con su obra” (1983).

Siempre irreverente, organizó muestras en un lavadero para desacralizar la noción de que el arte sólo debía ser exhibido en galerías o museos.

En 1991 integró una acción colectiva para la conmemoración de los 500 años del descubrimiento. “La Conquista”, una pirámide laqueada de color rojo con dos cuerpos geométricos dorados que refieren al oro extraído y la sangre derramada, un sillón colonial, emblema de poder, una terminal de computación en la que se registraban estadísticas sobre las etnias y el número de muertos durante la colonización. De esta obra de carácter minimalista se exhibe una maqueta parcial reconstruida en 2008.

Se exhiben fotografías a causa de su destrucción de otra instalación plena de simbolismos y alusiones, difícil de olvidar, “Wotan-Vulcano” (1991). Inspirada en la guerra del Golfo, escalofriante la visión de 8 féretros que Maresca limpió y purificó a través del fuego, instalados sobre una alfombra persa un ambiente dorado iluminado por una lámpara de petróleo.

En el Casal de Cataluña realizó en 1992 una instalación conceptual, despojada de todo esteticismo: tres carteles de publicidad en los que se leía : Disponible: Apto todo Destino. Liliana Maresca: 23-5457.Cuestiona así el rol del artista que necesita que “alguien” lo visualize y lo compre..

Unas gigantografías de fotos de archivo de Página /12 reproducen “Imagen Pública- Altas Esferas”. El cuerpo desnudo de la artista rodeado de retratos de dictadores, genocidas , rostros conocidos del poder y la corrupción que hacen como lo señala Lauría “que su cuerpo aparezca vulnerable”.

“Patín”!, “Ella y yo”, “Autito”, “Pinocho”, objetos entrañables que remiten a sus afectos, lúdicos, evocadores de su infancia realizados en 1994. Dibujos, poemas ilustrados: “Destellos de iluminación /Burbujas del Cosmos/ Mi vida es este dibujo/ vos, yo, mi diálogo estéril interrogando al vacío/. No contesta/ Dios da ocupado/ Y estoy sola/en el final de la copa. /La fuente no se agota

Una muestra cargada de sentido y que se lleva con uno al abandonar la sala.

Publicada en Ambito Financiero 6/7


Andrés Waissman

 

Lo que Andrés Waissman ha señalado a través de su pintura es la fugacidad, la fragilidad, la inestabilidad, la no pertenencia del hombre en un contexto ambiguo y dramático.

Sus metáforas pictóricas aluden a desplazamientos, destinos inciertos, una visión del hombre expulsado. ¿Cómo lo ha expresado a través del tiempo? Campos de batalla con formaciones listas para el combate, estadios, multitudes de seres anónimos apiñados en negros empastes, grises y ocres que se funden.

Este tema del ser anónimo que se desplaza masivamente, sin rumbo, se tradujo más adelante en pinceladas cortas, abigarradas, blancos y negros que viraban al gris para acentuar ese anonimato.

Pero apareció el rojo avasallante y las multitudes se convirtieron en una caligrafía obsesiva, oriental, con mensajes ocultos, códigos secretos con signos hebreos para después desplazarse hacia formas mínimas, desprendimientos a manera de mosaicos de colores.

En su actual muestra en el Centro Cultural Borges y con la curaduría de Gustavo Vázquez Ocampo, , Waissman mete las manos… en la viruta.

Un material no tradicional que el artista descubre por casualidad y que lo piensa y siente como posible para sus multitudes.

Un potente agente expresivo que también contribuye a estimular visualmente al contemplador, a esta altura, demasiado acosado por la proliferación de imágenes en infinidad de medios.

En la densidad y abigarramiento que le ofrece este material, un mundo gris, no hay resquicio. No hay salida para estas multitudes condenadas al silencio pero sí la hay para este artista siempre alerta en la búsqueda de su esencia, no conformista, ajeno a tendencias y que desarrolla sus ideas con la esperanza de un mundo menos hostil.

Publicado en AMbito Financiero 11/7


 Oscar Pintor – Fotografías

 

Hacia comienzos de los 60, Oscar Pintor (San Juan, 1941), compró su primera cámara Miranda 35mm para usar la fotografía como ayuda para su vocación que en ese momento era el diseño gráfico.

Realiza fotos publicitarias y entre 1968-1976 es director de arte y director creativo en importantes agencias de publicidad de Buenos Aires.

En 1978 inaugura su primera muestra individual y comienza a trabajar con el Concejo Argentino de Fotografía. Desde entonces sus viajes por el exterior lo vinculan con grandes maestros y fotógrafos contemporáneos, es asesor de fotografía de diversos centros culturales y en 1984 junto a otros 12 colegas funda el Núcleo de Autores Fotográficos.

Poseen obras suyas el Museo de Bellas Artes de San Juan, el de Buenos Aires , el Gabinete de Fotografía de la Biblioteca Nacional de París así como diversos museos de E.E.U.U.

A esta sucinta reseña biográfica debe agregarse lo señalado por Alejandro Montes de Oca, curador de su actual muestra antológica en el Centro Cultural Recoleta: “poner en escena el corpus de una obra que jamás ha sido exhibida en su totalidad, ya que este artista de la generación de los 80 se llamó a silencio durante 10 años”.

Se han seleccionado 80 fotografías realizadas entre 1979 y 1994 entre las que se encuentran paisajes, muchos de ellos de su provincia natal.

Nada es convencional, desde un interior derruído donde se ven los pastizales más allá del horizonte, la presencia de un gato “admirando” un paisaje barilochense, un caballito de calesita en un nevado parque neoyorkino.

Nada hay de artificial en sus imágenes, es fotografía en estado puro, lo sustancial es el contenido y la maestría de los contrastes lumínicos. A medida que se recorre la muestra también se reflexiona sobre frases que Pintor ha seleccionado de escritores como Ionesco, Wilde, Calvino, Goethe, entre otros, que a su vez revelan la profundidad de su pensamiento.

Si se trata de desnudos, leemos “lo más profundo del hombre es su piel” (Paul Valéry), que se transmite en el fragmento de un cuerpo femenino en la ducha “Desnudo y toalla”, aquél abrazándose y mimetizándose con una roca en Río Pinto así como el viril y escultórico torso masculino titulado “Pablo”.

Edward Weston dijo que “sólo con esfuerzo se puede obligar a la cámara a mentir: básicamente es un medio honesto; de modo que el fotógrafo tiene muchas más probabilidades de acercarse a la naturaleza con espíritu inquisitivo, de comunión, que con esa petulancia impertinente de los “artistas” engreídos”. Pintor admira a Weston por eso su fotografía es directa, creíble.

Los retratos expresan y revelan la interioridad del retratado, carecen de artificios y las escenas nocturnas no pretenden encandilar.

Interiores, paredes humildes, descascaradas, un pullover colgado de un alambre de púas, un arco precario de una improvisada cancha de fútbol en la inmensidad de Angualasto ( San Juan), sin duda la fotografía es un medio para tratar cosas a las que no se presta atención, allí están estas imágenes carentes de toda extravagancia pero que Pintor nos obliga a “verlas”.

A través de su herramienta, la cámara, y parafraseando a André Kertész, Pintor da razón de todo lo que lo rodea.

Dentro del Festival de la Luz, una muestra altamente recomendable por su concepto estético y la poética de sus bellas fotos.

Publicado en Ambito Financiero 15/8


Maquinaciones” Edgardo Antonio Vigo

 

Maquinaciones” Edgardo Antonio Vigo: Trabajos 1953-1962 se exhibe en el CCEBA (Centro Cultural de España en Buenos Aires).

Nada de lo realizado por este artista de culto y oculto para la mayoría podría calificarse como convencional. Quizás se lo conozca mucho más como el precursor del Arte Correo, una de las tantas disciplinas abordadas por este platense nacido en 1928 y fallecido en 1997.

Arte conceptual, xilografía ,poesía visual, edición de revistas , fundador del Museo de la Xilografía, ambulante, sin sede fija contenido en cajas y valijas (listo para montarse en cualquier espacio), fabricante de objetos, autor de manifiestos, crítico de arte, ensayista y del que no existe mención alguna en textos clásicos sobre el arte moderno argentino.

En 1969 organizó la Primera Muestra Internacional de Poesía Experimental en el Instituto Di Tella, editó las revistas Diagonal Cero (1962), Hexágono ,71 , entre sus ensayos.: “Hacia un Arte Tocable”, “La Calle: escenario del arte actual”, “Un Arte a Realizar” y “Relativuzgir’s, cópula de “relativo”-base filosófica- matemática de Einstein, “la electricidad” elemento actuante y de la propiedad de “girar”, es decir, escaparse de la representación del movimiento por el movimiento en sí” (Nov.1956).

Su producción en el Arte correo que prefería denominar “comunicación a distancia”, tuvo su etapa más prolífica desde mediados de los 70 hasta principios de los 90.

En 1994 integró el envío especial argentino a la XXII Bienal de San Pablo junto a Líbero Badii y Pablo Suárez.

La exposición actual cubre el período 1953-1962: diez años de intenso trajinar, según Mario H. Gradowczyk, autor del meduloso ensayo del catálogo y con el que trabajaron la Arq. Ana María Gualtieri, fundadora del Centro de Arte Experimental Vigo de La Plata, la museóloga Mariana Santamaría y profesora Magdalena Pérez Balbi que han inventariado detalladamente todo lo concerniente a una obra que merece ser conocida en profundidad.

Esta exposición “cumple con el dictum de Duchamp, al que quizás Vigo aspiraba, que prefería esperar unos 50 o 100 años para que la obra alcance su verdadero público antes de tener una reacción inmediata exitosa”. Profunda lección para estos tiempos mediáticos y la efímera pasarela del arte. Una exposición que no va a traer multitudes pero sí a aquellos que se permitan demorarse ante dibujos, acuarelas, textos, collages, que despertarán la curiosidad, que remiten a Klee, Picasso, Kandinsky, Mondrian realizados en París en 1953.

Al regresar de París a fines de 1953-un viaje de un año- que le permite tomar contacto con la intelligentzia de la época, cuando el informalismo está en apogeo, aprecia la libertad de expresión, se da cuenta de las limitaciones del medio cultural platense por lo que intenta instalar la idea de “nulidad de todos los movimientos artísticos que se desarrollan en el plano, en el espacio y en el truquismo visual, en la armonía, en los cánones de todos los ismos”.

A la manera de los dadaístas, de los vanguardistas, de los madí, construye máquinas imposibles: collages y dibujos con imágenes de la Loren y la Monroe-íconos femeninos de entonces- y artefactos que denomina “máquinas inútiles”.

En el capítulo del ensayo dedicado a las revistas Gradowcziyk señala la multifacética figura de Vigo como artista y gestor, La Plata es su centro de acción, así como la de editor, ensayista comprometido, poeta y diagramador de revistas , por ejemplo: WC de la que se editaron 5 números en 1958 y como el título lo indica refiere a Duchamp.

El Manifiesto de entonces señala: …”no copiamos no queremos ser “comentaristas” de la naturaleza sino actores…no queremos representar la expresión sino ser Expresión”.

Junto a César Paternosto, Alejandro Puente y otros artistas platenses forman el Grupo SÏ cuya actividad plástica es por entonces pujante.

En una pared de la sala se reproduce “Tornillos, herrajes, maderas/fierros, tornillos, herrajes, maderas/formatos, croquis, máquinas/ máquinas inútiles/máquinas imposibles/máquinas solteras/abrazaderas, tornillos, herrajes, maderas…. Correspondiente a Mi pequeño mundo poético de máquinas inútiles Mecánico, que resume en parte su tarea creativa.

Una muestra valiosa que invita a conocer y saber mucho más sobre un artista radical “cuya ironía es de afirmación, insolente pero constructiva, pensando siempre en ofrecer algo diferente al observador, para que lo comparta o lo rechace, pero nunca desde la indiferencia”.

Publicado en Ambito Financiero 29/8


Félix González Torres en MALBA

 

Malba-Fundación Constantini presenta la exposición “Somewhere/ Nowhere” “Algún Lugar/ Ningún Lugar” del artista norteamericano nacido en Cuba, Félix González Torres (1957-1996), exponente clave de la escena artística internacional en los años 80 y 90.

La muestra fue producida íntegramente por Malba de acuerdo a directivas internacionales y establecidas por el artista que incluyen tácticas para mostrarla, su preservación y distribución. Las obras fueron realizadas entre 1987 y 1995 y según la curadora, Sonia Becce, “el amor es el eje que atraviesa la exposición, entendido como una constelación de emociones y experiencias vinculadas con un afecto profundo, con el deseo, con el cuidado y el sentimiento de intensa atracción por otro, con el dolor por la ausencia o la pérdida del ser amado”.

Su obra es enigmática, es imposible comprender su significado desde un punto de vista visual, por eso, el artista señaló: “Mi obra es una historia personal. No puedo separar mi arte de mi vida”.

Otro pensamiento de González Torres : “No quiero que el público sienta…quiero que esté informado, que esté dispuesto a la acción. “Sentir” es demasiado fácil”.

De allí que sea necesario conocer el pensamiento de este artista ya que el concepto de ver la obra es tanto externo como visual, idea que Arthur Danto analiza refiriéndose a la problemática de ciertas manifestaciones del arte contemporáneo y propone “un encuentro, encontrarse con las obras en sus propios términos, una por una, tratar de comprender lo que intentan decirnos o lo que originan como consecuencia de este encuentro”.

El título de la exposición replica uno de sus primeros stacks, dos pilas de papel blanco, una junto a otra, con las inscripciones “Somewhere better than this place” y “Nowhere better than this place”(1989/1990) a la que el artista se refirió como dos amantes ateos que discuten acerca de hacer de este lugar el mejor de todos porque no hay nada más, ningún otro.

El visitante, ante este dilema , es invitado a llevarse una hoja y pensar acerca de la posibilidad o no de la existencia después de la muerte.

Tema también central en la obra de González Torres ya que su compañero de muchos años, Ross Laycock murió en 1991 por complicaciones relacionadas con el SIDA.

Todas las obras están registradas “Sin Título” pero un subtítulo las identifica. “Perfect Lovers” (Amantes Perfectos) , 1987/1990, dos relojes idénticos que dan la misma hora. Su sincronización habla del amor, de la relación entre dos seres homosexuales, dos corazones que aún latían : “El tiempo me atemoriza, es la obra más escalofriante que he hecho…”¿ cuánto faltaba para la muerte de Ross?

González Torres hizo Autorretratos y Retratos. En realidad, retratos de palabras que recorren el perímetro superior de la sala del primer piso. Los hacía por encargo y se exhibían en una sala privada del comitente o en una sala de exhibición pública.. Son momentos con fechas precisas, viajes, recuerdos alegres o no, “le pido a la persona que me de una lista de hechos importantes de su vida, le agrego algunos de carácter histórico que probablemente alteraron el curso de esos hechos, conflictos civiles, acciones militares, por ejemplo: Alabama 1964, Napalm 1972, Klaus Barbie 1944, Supreme Court 1986.El retrato se convierte en una crónica y no en un instante congelado.

Quizás una de las obras más reproducidas es la serie de “esculturas” que consisten en caramelos envueltos en celofán plateado amontonados en el piso (Placebo, 1991) o con los colores de la bandera americana también amontonados pero en un rincón (Para un hombre en uniforme, 1991).

Como en el caso de los papeles, el visitante puede llevarse uno, ya que su reposición es constante.

“Plataforma de baile go-gó”, madera, lámparas bailarín go-gó en short plateado, zapatillas y walkman, obra cuyo antecedente está en una exhibición de 1991 titulada “Todas las semanas hay algo diferente” en la que transformó la galería. Habría que remitirse al origen de la obra que tiene que ver con Roosevelt como héroe de guerra y la guerra que libra el stripper con los americanos heterosexuales.

En cuanto a los carteles de vía pública , a partir de fotografías en blanco y negro tomadas por el artista, en la terraza del Museo se exhibe “Cama” (1991). Una cama vacía y deshecha con dos almohadas levemente ahuecadas, una íntima y dolorosa expresión acerca de la pérdida de Ross. En el segundo piso, “Strange Bird” , 1993, muestra el vuelo de un pájaro en un cielo tormentoso.

Por decisión del artista estos carteles deben instalarse simultáneamente en distintos puntos de la ciudad, se los verá en Adolfo Alsina 800, Esmeralda 798, Paraná 363, Av. Pueyrredón 880, Av. del Libertador 2357 y 3552, Av. Carabobo y Rivadavia, Av. Cabildo y Sucre.

De alguna manera trato de negociar mi posición en esta cultura, se trata de dejar una prueba de que existo: estuve aquí. Tuve hambre. Fui vencido. Fui feliz. Estuve triste. Estuve enamorado. Tuve miedo, Tuve esperanza. Tuve una idea y un buen propósito y esa es la razón por la que hice obras de arte”.

Félix González – Torres murió de SIDA en 1996.

Publicada en Ambito Financiero 5/9


Luis Wells

 

Luis Wells pertenece a aquellos artistas irreverentes, transgresores, contrarios al buen gusto imperante que se propusieron desacralizar el arte argentino con grandes explosiones polimatéricas sobre la tela, uso de materiales de desecho, latas, maderas quemadas, cartones.

Esto sucedía hacia fines de los 50 como reacción ante la obra aséptica del arte concreto y el lirismo de la abstracción libre a través de obras provocativas que lograron transformar el lenguaje plástico, rescatar el absurdo, experimentar con esos materiales y encender la polémica, hoy, inexistente.

Como lo señalamos en 2002 en ocasión de una muestra del artista, el informalismo de Wells se orientó a reivindicar el collage y el assemblage en objetos que, aunque ejecutados en cartón, maderas y otros elementos descartables, fueron rigurosamente y contradictoriamente formales. Debe recordarse que el “objeto” revolucionó el concepto de arte y que el nombre le fue dado por los surrealistas, principalmente Breton que en 1935 pronunció una conferencia “Situación Surrealista del Objeto”. Este no está para cumplir una función y como lo señaló Andrea Giunta en un ensayo de 1990 “su aparición y desarrollo surge en el siglo XX y tiene que ver con una modificación en la manera de pensar al objeto cotidiano y aunque los materiales existían, lo que cambia es la posibilidad de pensarlos juntos y como medio de expresión artística”

Esto puede comprobarse en su actual muestra en la Sala Cronopios del Centro Cultural Recoleta donde dialogan obras de ese período con las más recientes bajo la excelente curaduría de Alejandro Dávila.

“Obra Imprevisible”, su título, fue sacado de una carta a Jorge Romero Brest en la que le expresa su deseo de “crear ambientes donde el hombre pueda desarrollar cosas positivas, de hacer algo más. Algo que yo no pueda prever”.

Lo imprevisible, una suerte de continumm desde sus comienzos, época de descubrimientos, de nuevas aventuras en las que la mayoría de estos artistas no estaba consciente de que eran tan de avanzada, se ve en los actuales “Toys”, objetos compuestos de dos o tres formas pintadas de colores brillantes que el contemplador o poseedor puede intercambiar en múltiples posibilidades.

También están los Techos, muy elogiados por Arakawa y Phillip Johnson en los 60 por su concepción original, volúmenes que se convertirán en obras arquitectónicas tanto exteriores como interiores.

Toda la obra de Wells, no obstante su postura radicalizada de los comienzos, se destaca por su ejecución formal, la elección de colores vibrantes que enfatizan lo lúdico, el blanco que acentúa los volúmenes, su concepción del espacio.

En cuanto a su actual obra pictórica revela un refinado cromatismo, por momentos, lo gestual atravesado por formas geométricas que se desplazan a manera de elementos en un paisaje.

En “El Complot del Arte”, Jean Baudrillard al referirse al arte actual señala que está compuesto de una profusión de imágenes en las que no hay nada que ver. Afortunadamente hay artistas que desmienten esta afirmación . Luis Wells es uno de ellos.

Publicado por Ambito Financiero 14/11


 Luis Felipe Noé

 

¿Se ha dicho y escrito todo sobre Luis Felipe Noé?. Creemos que no, ya que este artista sigue investigando, pintando, creando con el entusiasmo que contagia como cuando se conversa con él.

¿Qué decir entonces cuando se leen sus escritos como el del catálogo que acompaña su puntual muestra que cierra la temporada en Galería Rubbers, ilustrado con un satírico dibujo de 1975 “Intelecto en acción”?.

Artista en acción, maestro en acción, pensador en acción, escritor en acción, así podríamos intentar apenas una descripción de su polifacética personalidad.

El título de la muestra “¿Noemas o Noesis?” se las trae y recorrer el laberíntico proceso de las definiciones de ambos términos que Noé se dedicó a desentrañar en diccionarios de la Real Academia Española, enciclopedias, Wikipedia, Symploké (enciclopedia digital), tratados del estructuralismo y filosofía, es un verdadero “berenjenal”, término usado por el artista, tal como le sucedió a partir de la palabra noética, disparadora de noema, semema, lexema, morfema y así hasta llegar a la retórica o sea noema: un discurso poco claro que sólo brinda significado acompañado de reflexión detallada.

Aprendemos que en la fenomenología de Husserl “noema es aquello a lo que se refiere la noesis, en tanto que contenido suyo”.

Un tema que nos excede ya que nuestro objetivo es bordear la obra de un artista, en este caso, pictórica porque la pintura es para este artista un leguaje existencial

Como resultado de la lectura del texto, creemos que Noé se divierte jugando con las palabras, ya ha dado buena cuenta de ello en sus libros, y se enamoró de que su apellido encabece palabras poco accesibles al común de los mortales.

Bueno, a los cuadros. Esta muestra es superlativa, ¿cómo va a hacer este artista para superarse a sí mismo en la próxima?. No dudamos que volveremos a repetir el adjetivo.

En ese terreno que supera los límites tanto de la abstracción como de la figuración, su poder de comunicación es total, el espectador queda deslumbrado por las fuerzas en expansión, la exaltación del color, a veces exuberante, otras , más atemperado, el relato que se va desplegando a veces con furia, otras con mayor o menor énfasis.

Como muchas veces todo gira en espiral, uno debe perderse en los meandros de una compleja situación, casi todo está subvertido, distorsionado y sus obras requieren un “tempo” para ir y volver sobre ellas.

¿Qué otra cosa despierta Noé?. Más allá de la pasión con la que pinta y el carácter reflexivo de su pensamiento, es extraordinaria la libertad interna que le ha permitido no quedar atrapado en ninguna etapa de su desarrollo artístico.

Confesamos que su obra totalizadora nunca nos ha dejado indiferentes, que ella nos ha enseñado a estar alertas para no quedar tampoco atrapados en prejuicios y preconceptos y aprender “que la creación es un viaje, la obra no es el punto de llegada y en ella no termina el viaje”.

Publicado en Ambito Financiero 21/11


 

Jacques Bedel-Aproximaciones

 

“Jacques Bedel-Aproximaciones”.Son varias las series realizadas por este destacado artista argentino a lo largo de 40 años de su trayectoria que llevan esta palabra en los títulos de sus obras, por ejemplo, “Aproximación al Infinito” en la que comienza a indagar la cuarta dimensión, generalmente relieves con un tajo atravesado en el plano de un horizonte.

Aproximación a la Nada” en la que describe la trayectoria de las partículas subatómicas y el microcosmos en general. “Aproximación al Mal”, iniciada en 2005, una suerte de batalla entre microorganismos devorándose unos a otros, una técnica que ahora ha perfeccionado en la que utiliza dos placas transparentes y que se revelan gracias a la sombra que proyectan sobre la pared al ser iluminadas.

Su actual muestra en el Museo Nacional de Bellas Artes está compuesta por 40 obras de su reciente producción pero que se entrelazan con las ya mencionadas y que se refieren al paisaje que nos rodea.

Toda la obra de Jacques Bedel como arquitecto, escultor, pintor, dibujante, orfebre, decorador, puede clasificarse como innovadora además de estar sustentada en la investigación científica, una de sus obsesiones.

La muestra abre o cierra, es indistinto, con “Aproximación a los Sueños”, transparencia fotográfica s/PET, una visión que nos atreveríamos a llamar romántica , con personajes en medio de ese magma de mar y nubes amenazantes que lo contemplan con añoranza, o que se perderán en él para siempre.

La nueva serie de “Aproximación al Mal” realizada en 2007 , está compuesta de placas de colores netos que revelan desplazamientos acuosos y tambien aquellas en las que utiliza bolsas negras de residuos plegadas y telas iridiscentes, aguas quietas , densas, presagian la tormenta que se desatará así como la ola devoradora que arrasará con lo que queda de la naturaleza.

Obras perturbadoras por su imagen y cromatismo, a feeling of awe, nada mejor que esta expresión inglesa para definir esta sensación de temor reverente y también de pavor ante la destrucción que el hombre se inflige de manera inexorable.

La Garra de Dios”, Más allá de Dios”, “El rastro de Dios”, “El borde de Dios”, obra culminante, esa imagen cósmica del infinito, una franja brillosa sobre el abismo, conmovedora, que nos atrae desde un extremo de la sala quizás tengan que ver con otra de sus obsesiones, Dios o su ausencia, desde que realizara “El Ojo de Dios” (1969),“El Dios Reencontrado” (1986), “Deus, ecce Deus”(1995) que como muchos de sus temas, son recurrentes y a los que el artista vuelve de manera diferente.

Aunque la palabra belleza haya sido desterrada del léxico del arte contemporáneo, nos sentimos obligados a usarla no sólo para intentar una aproximación descriptiva de las obras en sí mismas sino como algo interno a su significado, a su pensamiento.

Una manera kantiana de representación sublime, por ejemplo, del océano, “no un vasto reino poblado de seres acuáticos o un gran depósito destinado a suministrar los vapores que cargan el aire de las nubes en provecho de la tierra – es necesario representárselo como hacen los poetas, conforme a lo que nos muestra la vista”.

Por eso, en Bedel se fusionan los materiales no convencionales, una investigación visual cuyos secretos pertenecen a la alquimia, la ciencia, un pensamiento filosófico, un compromiso moral y la poesía que emana de obras apocalípticamente bellas.

Para esta muestra se ha editado un excelente libro-catálogo de 300 páginas con medulosos ensayos de Antoine Raymond, Renato Rita y Ana María Battistozzi.

Publicado en Ambito Financiero 28/11


 Manuel Alvarez en el Sívori

 

 En el Museo de Artes Plásticas Eduardo Sívori se exhibe una importante exposición antológica de Manuel Alvarez (Buenos Aires, 1923) con obras realizadas entre 1954 y 2008.

De rigurosa formación junto a Marcos Tiglio, Miguel Carlos Victorica y Emilio Pettoruti, asiste a la Facultad de Filosofía y Letras de las que confiesa, recuerda las clases de griego y latín así como a los cursos de Jorge Romero Brest.

Se interesa por la lectura de San Agustín y de Henri Bergson, de allí la frase “El tiempo de San Agustín y el tiempo bersogniano son los conceptos que sigo trabajando hasta ahora” que el Arquitecto Alberto Petrina cita al comienzo del texto presentación en el catálogo de la muestra.

En 1952 se ha convertido en un pintor abstracto, vivió en París entre 1954 y 1956 donde tomó contacto con Pettoruti y se consustanció con las ideas del matemático rumano Matila Ghyka (1881-1965), autor de exhaustivos estudios de la sección áurea y que influenció a muchos de nuestros artistas concretos. Hacia 1955 se funda la Asociación Arte Nuevo donde coincide con Arden Quin, Blaszko, Tomasello, Vardánega y Villalba.

Pettoruti describe así la pintura de Alvarez: “exactamente igual a él, callada, limpia, clara, pensada, trabajada …que no hace ruido… hecha con amor de fuego y rango elevado”.

Su geometría, nos atrevemos a señalar, es resultado de su paz mental y si bien la contemplación demorada es difícil en estos tiempos tan vertiginosos, la obra nos va llevando a ciertos estados donde sólo es necesario quietud y calma.

También en tiempos de polución visual, de sobredimensionamiento de productos pictóricos, sus estructuras geométricas regidas por el número, el ritmo, la proporción, invitan también a entrar en armonía con la callada conversación que establecen las formas severas y los colores que exaltan una perfección lograda con rigor y depurado oficio.

Publicado en Ambito Financiero  19/12


 Colección Guerrico en el MNBA

 

Integrada por más de 600 piezas entre pinturas, esculturas, porcelanas, platería colonial, abanicos, lacas, peinetones de la época de Rosas, miniaturas, se ha inaugurado en las salas 16 y 17 del Museo Nacional de Bellas Artes, la exposición permanente de la Colección Guerrico.

Según María Isabel Baldasarre, investigadora e historiadora de arte, se considera a Manuel José de Guerrico (1800/76) como el primer coleccionista argentino.

Estanciero, militar, debió exiliarse en Europa después del asesinato en 1839 de su suegro, Manuel Vicente Maza. En su casa parisina comienza a formar su colección que trae al país en 1848 “para que sirviese de modelo a la juventud que quisiese dedicarse al cultivo de este ramo de las bellas artes”.

El núcleo original fue enriquecido por su hijo José Prudencio (1837/1902) quien hacia 1895 dona 22 obras que contribuyen a la creación del Museo Nacional de Bellas Artes.

En 1938, la mayor parte de la colección—627 piezas—pasó a dominio público gracias a la donación de sus descendientes.

Ha sido un acierto curatorial exponerla de acuerdo al montaje de las casas de los coleccionistas, museos y salones de arte de la época, las obras más pequeñas en la parte inferior y las de grandes dimensiones en la superior así como agruparlas según el género: retratos, paisajes, escenas de costumbres, marinas.

Se destaca el fondo carmesí de las paredes, los marcos, verdaderas joyas del artesanado europeo con molduras y dorado a la hoja, las vitrinas con las esculturas de bronce de animalistas y héroes de la mitología que permite también situarse en el abanico de las tendencias del arte del siglo XIX , algunas obras de pintura flamenca e italiana, un Zurbarán, “Monje Orando” y dos obras del siglo XVIII como “Los hebreos recogiendo el maná del desierto” y “El sacrificio de Melquíades” de Tiépolo.

Entre los retratos destacamos el de José Prudencio de Guerrico, de Joaquin Sorolla y Bastida que lo muestra en todo su señorío con fondos de pinceladas sueltas.

Figuran obras de Courbet, Corot, Boudin, Daubigny, Troyon, la “Diana Sorprendida” obra de gran tamaño del francés Jules Joseph Lefevre, figuras femeninas desnudas de cuerpos idealizados y piel tersa, que tiene su correlato en una obra premiada en Europa “Bagante Sedutta” de Antonio Tantardini, una figura femenina en mármol de carácter académico, característica del siglo XIX y comienzos del XX.

Un importante conjunto de quince telas de Genaro Pérez de Villamil (Galicia, 1807-1854), Caballero de la Orden de Isabel La Católica, Director de la famosa Academia de San Fernando, cuyos paisajes se caracterizan por una neblina dorada, interiores de iglesias y castillos, muy elogiado por Baudelaire.

Pequeñas obras de Mariano Fortuny, Ulpiano Checa del que no hace mucho se exhibieron grandes telas de batallas y escenas romanas, Madrazo, Ziem, Fantin Latour , L´Hermitte, un bronce de Rodin “La Defense” comprado en 1910.

De Eduardo de Martino, marinista de la corte de Inglaterra, llegó al país hacia 1870 y comenzó a exponer en 1879, autor que se inspiró en temas de nuestra marina de guerra, hay una marina comprada en Londres en 1888.

Es importante señalar el empeño de Guerrico en coleccionar obras de su tiempo que en su mayoría fueron adquiridas en Europa a través de anticuarios, galerías de arte y también directamente a los artistas. Un coleccionista generoso que siguió los pasos de su padre y a sus descendientes a los que se les debe este homenaje permanente, un acierto de las actuales autoridades del Museo que decidieron exhibir esta importante colección oculta durante muchos años.

Publicado en Ambito Financiero