22 marzo, 2020

Hernán Salamanco en Smart Gallery

Por Laura Feinsilber

“Mirador” es la primera muestra individual de Hernán Salamanco  (Buenos Aires, 1974) con obras de gran formato y que como marca de fábrica realiza sobre carteles de chapa.

Idea que surgió con la crisis del 2001, eran propaganda de las inmobiliarias que surgían por doquier y fueron el disparador para que este artista los eligiera como soporte para volcar su caudal pictórico.

Formado en la Escuela de Bellas Artes Prilidiano Pueyrredón, asiste en Bélgica al taller de litografía de la Academia de Bellas Artes de ese país y posteriormente  cursa estudios con el pintor Luis Duarte.

En 2010 recibió  el Primer Premio del Salón del Banco Central y el Segundo del Salón Banco Nación Argentino. En 2013 fue acreedor de la Mención Especial del Jurado en el 4° Premio ITAU.

Sobre esas chapas que tienen abolladuras, cuya superficie es irregular, unidas por clavos Salamanco trabaja con esmalte sintético y según confiesa, lo hace inclinado, para en cierta forma, dominar el material que produce chorreaduras, imprevistos que debe solucionar rápidamente.

Los temas de su muestra actual: paisajes de cascadas, selvas tropicales, flores exuberantes o a punto de marchitarse, una combinación figurativa –abstracta ni bien el contemplador se tome el tiempo necesario para mirar con detenimiento.

No es obra que pueda incomodar, está situada en la franja de lo reconocible y sobre la que no deben hacerse crípticas especulaciones.

“Hanging Lake” (2018), de gran formato, ocupa gran parte de la sala principal , podría caer en el cliché de paisajes congelados , nieve sobre las ramas , que se reflejan sobre un lago. Dicho así podría parecer kitsch pero hay algo que obliga a escudriñar centímetro por centímetro,  descubrir su pasión pictórica y nuestra capacidad para meternos en ese paisaje envolvente.

Así sucede con “Dancer in the dark” (2019), sí, un fondo oscuro pero un blanco iluminador que revela la fragilidad, lo efímero  de un ramo de flores que como no podía ser de otro modo, tuvo unos instantes de esplendor.

Salamanco capta momentos de la naturaleza que nos cautiva , sobre todo a los seres urbanos que no sabemos mucho de ella. Como lo señala Juan Batalla en un texto escrito para la muestra: “Quizás las obras no son solo lo que representan o lo que nos representan a partir de sus temas, sino una incitación hacia aquello que creemos conocer”. Parte del misterio que encierra una obra de arte.

Salamanco también piensa en el color, muy estudiado como en el caso de “Flores amarillas”. No importan aquí tanto la forma flores sino el estallido del color que se desparrama sobre las chapas, un todo  que da una vuelta de tuerca a lo que pudiera ser una cabal representación.

Salamanco , con esta muestra,  propone un verdadero desafío al acto de mirar.

Cierra el 29 de mayo. Av. Alvear 1580. Lunes a viernes de 13 a 19hs.

 

Publicado en Ámbito Financiero