Hernán Dompé en el MAT
El MAT, Museo de Arte Tigre, cumplió 10 años en 2016 y como cierre de su exitosa temporada se inauguró la muestra retrospectiva “Barcas, Guerreros y otros Mitos” del gran escultor Hernán Dompé que continúa hasta Abril 2017.
No escatimamos elogios para la puesta en escena de un corpus de obra en el que se conjuga el oficio, sus hallazgos de materiales y elementos cotidianos para sus ensamblajes que , en sus manos, transforma hasta convertirlos en sacrales.
No obstante la familiaridad que tenemos con su quehacer , el recorrido por la sala y los espacios creados con gran criterio curatorial a cargo de María José Herrera, directora del Museo, en el que dispuso la exhibición de 90 obras, permite que la sorpresa y por qué no, la emoción, invada al visitante..
Una sala aloja a sus célebres “guerreros”, ya listos para la lucha y la adyacente fue convertida en un lúgubre espacio con obras de 1983 , homenaje a las víctimas del terrorismo de estado , Dompé evita caer en lo panfletario y el espacio se convierte en lugar de reflexión sobre la muerte.
Ya en la sala principal aparecen sus barcas cargadas de religiosidad y también sus poderosos tótems en madera, hierro, piedra, el ensamblado de todos estos materiales con las huellas de sus incisiones, se yerguen majestuosos, guardianes de arcaicas culturas pero a los que Dompé dota de atemporalidad.
Muchas de las obras están coronadas por crestas, medialunas, arcos, una suerte de sello Dompé. También rayos como el que cruza el espacio en una de las salitas que reproduce su lugar de trabajo, toda una instalación en sí misma.
Los espacios que dividen la vastedad de la sala muestran vitrinas y obras que necesitan la intimidad para el diálogo.
El oficio de Dompé es admirable, ya sea para trabajar la piedra rugosa o pulida, como puede verse en yelmos, barcas, peces— es muy conocida su pasión por la pesca— y que , coronados por rayos , no es difícil imaginarlos atravesando ríos o mares.
Esta extraordinaria exposición muestra a Dompé y su oficio, su pensamiento, su capacidad para expresar el poder, la lucha del hombre, su relación con la naturaleza—afortunadamente el artista eligió vivir al pié del Uritorco—y su capacidad para lograr que el visitante salga transformado para enfrentar el hostil mundo que lo rodea.
Publicado en Ambito Financiero