5 diciembre, 2017

Fray Guillermo Butler en OSDE (nota y audio)

Por Laura Feinsilber

audio:

 

En 2005 el crítico de arte Rafael Squirru señaló que “se necesitaban pocas palabras para quien redujo al cosmos a pocos signos. Sus paisajes le dieron oportunidad para desplegar el genio de su humildad”.

Así se refería a Fray Guillermo Butler ( 1880-1961) cuya exposición que se exhibe actualmente en el espacio de Arte OSDE lleva por subtítulo “La Imagen sin tiempo”.

Bienvenida sea en tiempos de eventos artísticos, o pseudo, performances, instalaciones, exhibiciones que revelan el orden transitorio del “producto artístico”, el exceso de información sobre lo que acontece en el arte ya que que a un clic se consigue por internet, lo efímero del hecho artístico y su consecuencia, el olvido.

Es loable entonces que en este espacio de arte se haya planeado como cierre de la temporada artística esta muestra que nos está pidiendo un alto en el camino para deleitarnos con 80 obras que nos lleva por paisajes europeos, serranías cordobesas, arboledas, claustros solitarios, pintura religiosa, proyectos de murales para la iglesia de Villa María , vitrales, tintas y lápices, bajo la curaduría de Tatiana Kohan.

Fray Guillermo Butler nació en Córdoba , aunque otros investigadores señalan que nació en Génova. Se ordenó sacerdote dominico en 1907 y en 1908 partió a Roma para estudiar Derecho Canónico. Pero el arte pudo más y se inscribió en la Academia Libre de Florencia donde conoció la obra del pintor cuatrocentista Beato Angélico (1390-1455).

Después de una temporada en Francia donde  frecuentó a los nabis, entre ellos,  Maurice Denis  y Pubis de Chavanne , conoció la obra de Monet, Renoir y Matisse,  volvió a la Argentina y su envío al Salón Nacional de 1925, un pastel, “Paisaje de Córdoba”  fue galardonado con el Primer Premio.

Fue fundador en 1939 de la Academia de Bellas Artes Beato Angélico. Y también frecuentó  a artistas como Curatella Manes que intentaban renovar el ambiente artístico

En cuanto a su pintura se señalaba que “su orquestación cromática se concreta al pianísimo de los azules, lilas, oros pálidos”  (página 57, Fray Guillermo Butler Zurbarán Ediciones)

Los paisajes de Butler , según la poeta Delfina Bunge de Gálvez, “apaciguan el alma sin apoderarse de ella. La apaciguan justamente para que se sienta más individual y más libre”.

Se lo puede calificar como puntillista que será su característica, una manera de encarar la pintura con un talante  donde priman la espiritualidad y la bonanza. De allí lo armonioso de sus pinturas que emanan un  misticismo que llega suavemente  al contemplador.

Uno de los logros del montaje es la proyección sobre el piso de uno de sus diseños para vitrales.

Publicado en Ambito Financiero