17 febrero, 2014

Premio Trabucco 2014

Por Laura Feinsilber

El Premio Alberto J. Trabucco que otorga la Academia Nacional de Bellas Artes presenta en el Centro Cultural Recoleta su Edición 2013 correspondiente a las disciplinas Escultura y Dibujo. Los artistas convocados poseen importantes trayectorias y varios de ellos han sido merecedores de los más importantes premios nacionales.

Es excelente “Chacmol” (2013) en chapa cortada en plasma , policromada, de René Claudio Gómez.

Edgardo Madanes presentó “Un Posible Final” , construcción en mimbre y cuero. Como es usual en este artista domina un material que puede doblegar logrando formas de gran levedad.

La madera ensamblada caracteriza la obra de Fabio Miniotti : “Sin Título” (2011) se impone por su presencia pregnante en el espacio.

“Libertad” (2013), acero curten y letras caladas al chorro de agua de Marie Orensanz, artista de vasta trayectoria que, entre sus numerosos premios, fue ganadora del Concurso Parque Nacional de la Memoria , lugar donde está emplazada “Pensar es un hecho revolucionario” frase por la que se puede entrever el cielo.

Eduardo Rodríguez, artista relacionado con la luz, el color, el reflejo, el sonido, presenta “Nunca te bañarás dos veces en el mismo río-Heráclito” (2013), acrílico, acetato y movimiento, un refinado trabajo cinético de gran magnetismo.

Cristina Tomsig exhibe “Objeto Naranja”, ensamble, acrílico y acero inoxidable, un atractivo trabajo de módulos que se despliegan.

Carola Zech, reciente Gran Premio de Honor del 102° Salón Nacional de Artes Visuales exhibe “Magnético” 241 (2013), acero, pintura bicapa, constituido por módulos unidos por imanes que le permiten infinitas relaciones acentuadas por un monocromatismo iridiscente.

La obra escultórica de Chalo Tulián ha sido siempre exuberante, como su personalidad. Este artista que ha recibido los más importantes premios del país siempre arriesga en sus construcciones como en el caso de “Atropello a la razón” (2013), lámina de hierro soldada, madera tallada y ensamblada . Con el tronco de árbol sobre los otros elementos Tulián parece decirnos que contra la naturaleza no se puede…

El Premio Adquisición le fue otorgado a Marina Papadopoulus por “Trama VI” (2013). Realizada en planchuela de acero inoxidable, doblada y trenzada, constituye curvas en el espacio, obra que tiene ritmo, movimiento, una línea envolvente que no se cierra.

Se rinde un merecido homenaje a Danilo Danzinger (1942-2013) con una obra perteneciente a la serie Paleobotanica Australis de su última muestra en el Palais de Glace en 2012. Realizada en mármol de Carrara , materia, que según María José Herrera, “se le impuso como el más apropiado para reproducir fielmente la sabiduría geométrica de los bosques”. Una estética vitalista en la que no hay huellas de la gubia ni marcas de los dedos, su fuerza proviene de su interior.

En la disciplina Dibujo, Marcelo Boullosa trabaja la tinta sobre papel, creemos haberlo señalado anteriormente, de manera obsesiva.

Blur I,IIy III ( 2013), así lo revelan. No lo imaginamos abandonando la pluma hasta completar el espacio del papel, una línea que no se cierra nunca, un continuum, una sutil malla que atrapa la mirada.

Lápiz y pastel utiliza Jorge Garnica para su serie Humus(2013). Formas extrañas como vistas a través de un microscopio que parecen flotar en el espacio, siempre intrigantes.

Sivia Gurfein presentó recientemente en la Galería Klemm una serie de pinturas abstractas a la manera de estudios sobre el color, atemporales, de gran espiritualidad. Su envío al Trabucco es un conjunto de delicados paisajes, lápiz sobre papel con títulos de carácter literario: “Ceremonia improvisada trama urdida”, “La tierra por sus océanos atravesada” , “Del capítulo en el que nuestra heroína firma Loiseau”.

Ladislao Magyar es un atento observador de lo que acontece en la calle. Lo traslada a la pintura y al dibujo de manera fragmentada, la figura humana en diferentes actitudes, con gran dinamismo. Basta un fragmento y el espectador puede completar la historia en estas tres obras de 2013, “Caminantes en la red”, “Señales e Ilusiones” y “Sendas Ignotas”.

Los grafitos de José A. Marchi nos retrotaen al siglo XIX, escenas, figuras y objetos de la época, un maestro de la luz y la sombra.

Excelentes las tintas sobre papel y poliéster (2013) de Elena Nieves que parecen interrumpirse, paisajes sugeridos, la línea sigue un derrotero en el que se combinan la levedad y la intensidad para detenerse ante un blanco silencioso.

Emilio Reato describe su obra como perteneciente a “un realismo improbable”. Un pueblo de provincia o del conurbano con alguna arquitectura o monumento que lo distingue, tonos pastel,

Siempre en clave de humor y con algún elemento inquietante, óleo y acrílico sobre tela de la serie realizada en 2011 “Entonces advertí que ella era yo”

Nahuel Vecino realiza una serie en sanguina y pastel sobre papel, “Una certeza dentro de mí”, “Orfeo de Michoacán”, (2013) un paisaje de fondo y un primer plano de una planta quizás carnívora a punto de desplazarse.

De gran nivel el envío de Inés Vega, grafito sobre papel. Seres estáticos, de mirada inquisidora, en un hábitat teatral que se origina en sus esculturas blandas. En las obras presentadas realizadas en 2013: “Un mar de lápices”, “El novio navegando, “El angel en la nieve” revela esta artista su maestría en el claroscuro.

“Mi otro jardín”, “Buenos Aires”, “Cama”, de la serie “Period Rooms”, (2013), grafito sobre placa, son los títulos de las obras presentadas por Juan Andrés Videla, acreedor del Premio Adquisición.

Desde sus barrocos salones pertenecientes a su serie “Interiores”, a las anodinas casas y calles del gris conurbano, a los brumosos y desolados matorrales o a las zanjas, ya sea en pintura o dibujo, el espectador es permanentemente engañado por la técnica depurada de este artista que nos hace pensar que estamos frente a una fotografía que nos transmite nostalgia y melancolía.

Publicado en Ambito Financiero